Una Mujer Comprometida

Desde su labor, tanto como madre al igual que política, Zaida siempre ha estado comprometida con sus ideales, con su forma de trabajo pero sobre todo, con su integridad y honestidad. Sin dudas, que su legado colorado y batllista -herencia familiar indiscutible- la ha llevado siempre a estar del lado de los más humildes y vulnerables, pero igualmente en un terreno donde se pierde el foco en las personas, ella ha luchado incansablemente por humanizar la política. Un terreno que, naturalmente, es de baja incidencia publicitaria, pero inmensamente gratificante. Siendo mujer, como tantas otras, ha tenido que sufrir en carne propia el flagelo de la desigualdad de género -sobre todo en el ámbito político-, lo que ha grabado en ella un profundo compromiso con hacer del Uruguay un país libre de violencia y desigualdad de toda clase, especialmente de género. Sin importar el lugar, ha conocido de primera mano las necesidades de todas las mujeres; desde el campo a la ciudad, desde la trabajadora a la ama de casa, desde la obrera a la empresaria.